Presenciar un robo por las callejuelas de Alfama, no poder hacer nada, que el perjudicado sea amigo de un amigo, invitarle a cacahuetes y coca cola, acompañarle a hablar con la policía y acabar escuchando a un viejo profesor de guitarra alemán, concretamente de la selva negra, interpretando el Concierto de Aranjuez a cambio de unas monedas, almendras y tabaco en el mirador de Santa Lucía. Esa ha sido esta noche. Extraña y cálida noche.
Vaya ajetreo pequeña!! Sólo podía pasar en Lisboa... aunque podías haberte explayado más y hacer una bonita historieta!! Para la siguiente entrada ;)
ResponderEliminarPD: te quiero.